Twilight: 2000 es un maravilloso juego de estrategia por turnos.
Para quienes no hayan jugado el RPG de lapiz y papel de Twilight 2000, el juego tiene lugar en el año 2000, luego del final de la Tercera Guerra Mundial. El Baron Czarny es un ex-oficial de ZOMO que busca controlar Polonia y probablemente el resto del mundo. La historia del juego sigue un tópico bastante común.
El juego empieza con la pantalla de creación de personajes, donde el jugador puede crear su equipo. La creación de personajes virtualmente no tiene límites. Puedes crear un escuadrón de hasta 20 (menos de eso podría dejar vacíos en tu escuadrón). Eventualmente, la guerra iniciará, y cada personaje será asignado a una división militar. Luego de determinar las habilidades de tus personajes puedes empezar a equiparlos. La cantidad de dinero que puedes gastar en cada personaje está determinada por la cantidad de tiempo que ese personaje ha pertenecido a la milicia. Una vez que terminas de crear tus personajes (algo que puede tomar días), entras a Polonia, que ahora es una tierra devastada. Sin embargo, antes de visitar la devastación misma, entras a la base donde recibirás las misiones. Puedes elegir que personajes, vehículos y equipo llevarás a cada misión. Una vez que escoges y equipas a tus personajes puedes salir de la base (aunque podrías salir en cualquier momento) e intentar liberar a Polonia del Baron Czarny. Aunque eso te tomará un largo tiempo, así que mejor te conformas con liberar unas cuantas hojas de pasto por el momento. Ahora que tienes a tu equipo de cuatro en el pueblo, puedes caminar en 2D hasta tu destino o utilizar el mapa para llegar ahí. Eventualmente te encontrarás con algunas personas que no quieren que tengas esas lindas y relucientes armas (traducción: quieren matarte y llevarse todo lo que traes encima), así que deberás enfrentarte a ellos. El combate está bien pero se vuelve algo aburrido, porque sucede una y otra vez en cualquier lugar a donde vas en todo momento.
La música es genial, pero los efectos de sonido son inútiles. Durante la generación de personajes las gráficas son pasables. Las gráficas dentro del juego también son decentes, pero se tornan repetitivas. En conclusión, este juego tiene el potencial de darte una cantidad prácticamente interminable de diversión, y lo recomiendo mucho.