Es China, a finales del segundo siglo. El colapso de la dinastía Han ha creado el caos y una complejidad nunca antes vista, y China ahora está dividida en muchos estados pequeños. Existe un ambicioso señor de la guerra, Cao Cao, quien quiere reunir China, pero él no está solo... Bueno, ¿qué esperabas? Quiero decir, ¿quién no querría toda China para si mismo? ¿Alguien?
Al comienzo del juego eliges si quieres condiciones históricas o aleatorias, y el periodo de tiempo. Después de eso, el juego comienza.
Como un gobernante, tienes mucha libertad. Puedes mejorar las ciudades, reclutar tropas, construir armas, buscar personas útiles... simplemente, tienes muchas cosas que puedes hacer. Naturalmente, la mayoría de estas cosas son realizadas por alguien más, así que tendrás que elegir a las personas correctas para hacer lo correcto. Los consejeros también son importantes, ya que pueden tomar dediciones en asuntos del estado de forma más sencilla.
Un pequeño detalle que me agradó en particular es la diplomacia. Cuando envías a alguien a negociar, puedes ver como avanza todo el proceso de la negociación - es como un pequeño diálogo. Lo sé... nada muy fabulosos, pero siempre disfruto tales detalles en un juego.
Las personas son una parte importante del juego. Nunca se pueden tener suficientes oficiales con habilidades. Puedes recompensarlos (por ejemplo, al darles un ítem que incrementará sus fuerzas) para incrementar su lealtad, cambiar sus posiciones) hacer a un oficial militar un oficial civil, etc.) o despedirlos. Hablando de las personas, debes (como todo buen gobernador) preocupare incluso por las personas normales. Simplemente debes comprar sus favores con chanta- ehh... con regalos (como darles comida gratis), o ellos podrían decidir que no eres el gobernante para el que les gustaría trabajar y se revelarán. También, puedes contratar soldados en lugar de reclutarlos.
Los militares también son importantes, y diría que es bastante acertado. Incluso una pequeña, y bien entrenada fuerza elite puede defender tu ciudad con éxito contra un gran ejercito que consista de campesinos sin entrenamiento. Puedes armar a tus soldados con ballestas, darles caballos, etc.
También, otra cosa a favor de este juego es el interesante sistema de batallas el cual más o menos se repite en la mayoría de juegos de KOEI. Es difícil describirlo, pero es bastante simple de entenderlo.
Lo bueno es que mientras el juego es realista, no es para nada complicado, lo cual es donde creo que radica su grandeza. Sólo puedo pensar en un único defecto, y este es su IA, la cual puede ser un poco tonta... pero es más o menos buena.
Entonces, ¿qué tan bueno es el juego?
¡Es excelente! Un verdadero clásico, muy bien balanceado y para repetir. Le doy un 4 de 5.