Download High Seas Trader

High Seas Trader te coloca en los zapatos de un comerciante de los siglos XVIII y XIX, cuando la Gran Bretaña tenía colonias en la India y las colonias americanas ya se habían independizado. Tienes un barco, unos pocos hombres, un mapa de Europa Occidental y 5.000 en metálico. De forma gradual tendrás que reclutar marineros, comprar barcos mejores, conseguir mapas ¡y comerciar!

High Seas Trader no trata solo de comercio. Debes navegar, luchar contra los piratas, matar enemigos de tu país y evitar las ciudades hostiles. Por ejemplo, si se declara la guerra entre Inglaterra y España, eres inglés y tu ruta de comercio es Liverpool – Bilbao, deberías volver a pensar todo tu planteamiento. ¿Es rentable comerciar tabaco con Portugal? ¿Existe demanda del grano de Marsella? Tu fiable libro de precios viene muy a mano para resolver este tipo de incertidumbres. El libro muestra los precios de compra y venta en todas las ciudades (de las cuales tengas tú mapa). Pero los precios no son constantes. Si traficas mucho grano de un lugar a otro, el precio de tu proveedor aumentará y, además, se quedará sin existencias de grano. Sin embargo hay muchos bienes, algunos más caros que otros, y el modelo económico del juego es preciso. El tabaco siempre es más caro que el grano, y las colonias británicas en la India siempre demandan más armas.

Hay como seis tipos de barcos, algunos de los cuales son mejores que otros para comerciar. También, cuando eres un comerciante inexperto, los armadores no te proporcionarán los barcos más grandes hasta que aumente tu reputación. Algunos barcos casi no tienen espacio para carga, pero tienen muchos cañones; otros estarán prácticamente indefensos pero tendrán mucho espacio para cargar cientos de toneladas. Pero no olvides que debes alimentar a tu tripulación. Existen cuatro cosas básicas que necesita tu tripulación cuando navega, y si se te agota una de ellas tu tripulación no estará contenta. Además, debes pagarles. Normalmente aguantarán uno o dos meses sin paga, y esto puede ocurrir en los seis primeros meses de juego, hasta que consigas algún beneficio. Puedes contratar un timonel para que gobierne tu barco a lo largo de una ruta que hayas establecido, lo que te permitirá olvidarte de los azares de la navegación. Por supuesto que esto es sólo una opción, pero el océano Atlántico es largo y aburrido...

Esto me lleva a la siguiente parte. El mundo en el que se desarrolla el juego es, literalmente, el mundo. Asia, India, África, Europa y las Américas se han modelado completamente, con la posibilidad de trazas miles de rutas distintas para viajar. Pero debes comprar mapas en las ciudades a las que llegues, y cada ciudad tiene un conjunto de mapas distintos cada vez que la visitas. Debes comprar tantos como puedas, ya que no puedes saber dónde están las ciudades si no tienes mapas. Esto es especialmente útil para cuando se te acerque alguien preguntándote por pasaje para algún lugar. Tu primer oficial te dirá si tienes esa ciudad en tus mapas. Estas personas a veces llevan algún tipo de carga, pero te pagarán generosamente. También están aquellos que no te pueden pagar, o que se supone que están haciendo una misión para tu país.

Un punto negativo son las animaciones en el puerto y en la introducción, las cuales son lentas en DosBox y no funcionan en XP. Pero siempre puedes saltarte la introducción y eliminar las animaciones en las ciudades.

¿Piensas que puede ser divertido? ¡Sólo hay una manera de saberlo!