Este juego de estrategia basado por turnos fue publicado en 1995 por Empire Interactive Entertainment, y describe la entera guerra civil Americana. El juego tiene tanto un modo campaña, donde tienes la oportunidad de dirigir el bando de tu elección a la victoria, como un modo escenario en el cual puedes pelear batallas tácticas, individuales. Luego de escoger qué tipo de juego quieres, serás llevado a la pantalla de realismo, donde puedes ajustar la dificultad/realismo del juego. Hay nueve diferentes factores de realismo, con cinco diferentes ajustes cada uno, por lo que en esencia tienes 45 diferentes niveles de dificultad para escoger.
Desafortunadamente no hay mucho de qué hablar sobre el modo escenario, debido a que solamente incluye cuatro batallas (Bull Run, Wilson Creek, Mill Spings y Shiloh), y encima las batallas no son realmente tan interesantes; tus divisiones están representadas por banderas en el mapa, a menos que lo aumentes completamente, en tal caso se te presentarán animaciones feas. Puedes elegir adjuntar o separar divisiones de la cadena de comando según lo veas adecuado. El tenerlas todas adjuntadas las reúne alrededor tuyo, comandante, y te permite moverlas todas de una sola vez, pero el separarlas te otorga mucha mayor flexibilidad táctica. Desafortunadamente las batallas tienen lugar en tiempo real, y el reloj corre rápido, lo que significa que no tendrás tiempo para dar órdenes a un montón de divisiones individuales si tu ejército es muy grande. Debido a esto, es muy fácil perder el control sobre lo que está pasando, y generalmente termina en mucha confusión (y no hablemos de derrota).
El modo campaña es donde el juego realmente se pone interesante, ya que ahora tienes control sobre tu nación y no simplemente tu ejército. La mayor parte de la campaña tiene lugar en la pantalla de mapa estratégico, que muestra un mapa de la parte oriental de los Estados Unidos. Desde aquí tienes la oportunidad de decidir qué producen tus ciudades y hacia dónde se dirigen tus ejércitos y barcos. Igual que en el modo batalla, puedes adjuntar o separar tus divisiones y brigadas de sus comandantes, por lo que tienes la elección esparcir tus ejércitos para cubrir más terreno o unirlas en un lugar para fortalecerlas. También tienes la opción de reemplazar comandantes según lo veas adecuado, y puedes crear nuevos ejércitos y brigadas si has creado suficientes divisiones para hacerlo. Todos tus comandantes provienen de tu conjunto de comandantes, el cual consiste en su totalidad de comandantes históricos, cada uno con diferentes puntos fuertes y débiles, y el poner el hombre adecuado a cargo puede significar la diferencia entre la victoria y la derrota.
Tu objetivo en el modo campaña es acumular puntos de victoria, y cuando tienes suficientes, ganas. Obtienes puntos de victoria capturando ciudades, tanto las de tu oponente como las que empiezan siendo neutrales. La cantidad de puntos de victoria que necesitas depende del ajuste de la dificultad. Como se mencionó previamente, el juego de campaña está basado en turnos, das tus órdenes por la noche, y son llevadas a cabo durante el día. Pero a pesar de que está basado en turnos, no tienes tiempo para sentarte y relajarte, considerando cuidadosamente qué hacer después, ya que hay un límite de tiempo. En los niveles de dificultad más altos, no tendrás tiempo para dar todas las ordenes que querrías, y tendrás que priorizar, mientras que en los niveles más bajos tendrás abundante tiempo para formular una buena estrategia. Lo que este juego necesita desesperadamente es algún tipo de ventana que pueda decirte cuantos recursos tiene disponible cada ciudad, y qué están produciendo esas ciudades en ese momento. Incluso en los niveles de dificultad bajos, donde tienes abundante tiempo, se vuelve muy tedioso verificar todas las ciudades (hay un montón de ciudades en este juego) cada turno para ver si han acumulado suficientes recursos para crear esa división de infantería que quieres.
El desplazar tus ejércitos puede ser confuso al principio, hasta que le agarres la mano. Las vías de trenes y los ríos son muy importantes, ya que pueden incrementar enormemente la velocidad de tus ejércitos si los utilizan, pero, por supuesto, no puedes transportar tropas a lo largo de una vía de tren o río si no lo controlas, lo que significa que se vuelve imperativo que te esfuerces en la guerra para controlar tramos importantes de vías de tren o ríos. Cuando tus ejércitos encuentran al enemigo pueden suceder dos cosas; si cualquiera de los ejércitos está acuartelado en una ciudad, el resultado será automáticamente calculado y simplemente se te dirá cómo terminó, pero si dos ejércitos se encuentran afuera de una ciudad, se te preguntará si quieres jugar la batalla tú mismo. Si decides hacerlo, el juego entrará en modo batalla, exactamente como en los escenarios, y entonces tienes que hacer lo mejor que puedas para derrotar a tu enemigo. Por suerte puedes simplemente pedirle a la computadora que calcule el resultado dejándote continuar con el juego. Cuando los barcos entran en batalla el resultado también será calculado automáticamente.
Como ya se mencionó previamente, hay muchos niveles de dificultad diferentes, lo que significa que puedes hacer el juego tan simple o difícil como quieras. O al menos, eso es lo que debería ser. Desafortunadamente la IA no es muy buena, y el ganar un juego con cualquiera de los bandos, en cualquier nivel de dificultad, no es muy difícil una vez que te familiarizas con la interfaz y las mecánicas del juego. Aunque, el nivel de dificultad todavía importa, ya que decide cuántos tipos diferentes de construcciones y tropas puedes crear, cuán bien responden tus tropas a tus ordenes y muchas otras cosas, que pueden ayudar a hacer tu juego más complejo, si no realmente difícil.
Entonces, ¿cómo son los gráficos? Bueno, como se mencionó previamente, los gráficos en el modo batalla son bastante malos, y desafortunadamente no son muy diferentes en el modo campaña. Tus ejércitos siguen representados por banderas, y tus ciudades son representadas por cuadrados. Pero en el modo campaña, los gráficos al menos sirven a su propósito. Aunque no son exactamente lindos, sí facilitan darse cuenta que está pasando, en dónde están tus ejércitos y barcos, dónde están yendo, dónde están tus ciudades importantes, etc.
El sonido es un poco más interesante, porque, aunque casi no hay efectos de sonido, hay una buena banda sonora. La lista de reproducción del juego está llena de auténtica música de ese período, y aunque la calidad no es genial (midi), aún así añade algo de sabor y ayuda a meterte esa atmósfera de guerra civil a la que el juego está apuntando. Se puede decir que los diseñadores han hecho lo que han podido para hacer este juego tan auténtico como ha sido posible; aparte de la música, y de los auténticos generales, el juego ofrece una enciclopedia, la cual es accesible desde el menú principal. Ésta contiene muchas cositas interesantes sobre la guerra civil, incluyendo descripciones de muchos de los líderes de esa época, artículos de diario sobre la guerra civil, e incluso contiene letras para todas las canciones de la lista de reproducción, permitiéndote cantar canciones tales como Roll Alabama Roll y The Battle Cry of Freedom, si tú quieres.
En resumen, este juego tiene demasiados defectos para ser recomendado a alguien, excepto a aquellos con algún interés en la guerra civil, si eres uno de ellos, puedes encontrar entretenido el juego, al menos por un tiempo. Sin embargo, debe mencionarse que algunos parches fueron publicados para el juego, y que esos parches corrigen algunos defectos mencionados en esta revisión. Lo más notable es que a los gráficos se les ha dado un adelanto importante, haciéndolo parecer un juego completamente diferente (en el buen sentido). Estos parches no están aplicados al juego debido a que arruinan el modo batalla del juego. Sin embargo, pueden encontrarse en la sección extras en esta página, por lo que si no te interesa el modo batalla, adelante, aplica los parches simplemente descomprimiendo el archivo con el parche en el directorio en el que hayas puesto The Civil War. También debe mencionarse que las capturas de pantalla son de la versión sin el parche, y la revisión aplica a la versión sin el parche.
El puntaje final para el juego es tres sobre cinco. Le hubiera dado un dos, debido a que contiene muchísimos defectos, pero los parches lo elevan a un tres, al corregir algunos de esos defectos. ¡Disfruta!
Nota del Actualizador:
¡Asegúrate de echar un vistazo en la sección de extras de este juego al manual, las pistas y –lo más importante- los parches!