Si las mujeres vivieran más tiempo que los hombres debido a que Dios les regresa el tiempo que pasan aparcando sus autos, entonces yo podría vivir al menos otros 100 años por el mismo criterio. Sin embargo, no debido a aparcar, sino debido al tiempo que paso jugando este título.
Aunque, a primera vista, podrías pensar que este juego no tiene mucho que ofrecer, detente y piénsalo de nuevo. Tras una interfaz algo ridícula descubrirás un juego fantásticamente dinámico y excitante. Una vez que te vuelvas adicto a este, y te acostumbres al pequeño tipo redondo con gran nariz, estarás listo. Muchas horas de intentar golpear la pelota ganadora te esperan.
Quien quiera que se atreva a intentarlo, adelante, sólo pesa unos pocos kilobytes ;)