Joust es un juego bastante querido cuando se trata de títulos clásicos de arcade, y las conversiones del mismo a otros sistemas son inevitables. Los intentos de Atari en 1983 son de hecho bastante sólidos, una vez que ves más allá de los cuestionables controles y su molesta falta de buen soporte de audio (o quizás eso fue mi culpa, mejor me callo). Algo que sinceramente me sorprendió fue la claridad de los gráficos. Los gráficos en VGA son bastante claros y pulidos, y hacen buen uso del color, con animaciones bastante impresionantes para su época. Sin embargo, algunas imágenes están pobremente logradas, por ejemplo, las grandes criaturas que parecen aves (solo puedo asumir que se trata de dinosaurios) parecen troncos de excremento y son casi imposibles de destruir. Los jinetes son, por fortuna, mucho mejor logrados. Son coloridos y tienen avestruces que varían en coloración. Mis favoritas personales son las avestruces marrones porque me recuerdan al chocolate.
Además de los maravillosos gráficos antiguos, tenemos también maravilloso sonido antiguo. Éste consiste básicamente en los sencillos pitidos que podrías esperar de los videojuegos que los herreros japoneses crearon en sus forjas hace 500 años mientras meditaban sobre la luna. Afortunadamente están bien logrados y el inconfundible golpeteo de los pies de las avestruces cuando corren aún está aquí. Podría continuar diciendo que existen pitidos adecuados para cuando embistes a otro jinete en la espalda o golpeas a un pterodáctylo volador, pero de seguro ya sabes eso. El único sonido que podría calificarse como molesto es el agonizante chirrido que las criaturas prehistóricas emiten cada cuarto de milisegundo que están en pantalla. Lo que de seguro no sabes es que un hombre narcoléptico programó el sonido en Joust, y por lo tanto el sonido desaparecerá a intervalos al azar para luego regresar en momentos inapropiados interrumpiendo mi silenciosa relajación con una taza de té. Esto es extremadamente molesto (sin tomar en cuenta el té) y hace parecer a los programadores muy, muy perezosos. Quizás no sea un verdadero error de programación o como quiera que se llame cuando las cosas no funcionan correctamente en un videojuego, y en realidad podría ser solamente DOSBOX siendo molesto, pero ya que ejecutar Joust en Windows XP envía a mi PC a las profundidades de Hades, quizás sea mejor mencionarlo aquí ya que dudo mucho que estés leyendo esta reseña en una PC IBM de la era de los '80s.
Como es de esperarse, hay una cantidad prácticamente infinita de niveles y, por lo tanto, el juego puede durar hasta el fin del universo, o hasta que te aburras. Si has jugado Joust antes, entonces has jugado esta encarnación del juego, tipos montando en avestruces portando palos puntiagudos intentan destruirte a ti (o saltan alrededor sin cesar con la esperanza de que tú eventualmente te cruces en el camino de sus lanzas) y animales prehistóricos ocasionalmente volarán a través del escenario dejando perplejos a todos por estar totalmente fuera de lugar. Es tu deber, como concursante anónimo de justa, matar indiscriminadamente a todas estas personas que montan avestruces y asegurarte de que todas las majestuosas criaturas prehistóricas inocentes sean enviadas de vuelta al infierno. Esto se logra embistiendo o saltando sobre ellos con el extremo correcto de tu lanza, lo cual termina con su miserable existencia. Por supuesto, no es fácil, y menos aún en esta iteración. Por alguna razón necesitas tener precisión quirúrgica. La única vez que logré matar sin problema a una criatura voladora prehistórica fue estando parado sin hacer nada mientras intentaba averiguar los controles y una de ellas voló directo hacia mi lanza, se convulsionó violentamente y sufrió una horrible muerte agonizante. Habiendo dicho eso, la version de Joust de Atari es mucho más difícil que la version de arcade, y no ayuda el hecho de que necesitas tener los diminutos dedos de un niña de 4 años para poder utilizar los controles adecuadamente. Las teclas para aletear y moverse están apretujadas en el mismo sitio y a pesar del tener una opción en el menú para "cambiar la tecla de aleteo" increiblemente ésta solo cambia los controles del segundo jugador, porque aparentemente el primer jugador es un gran imbécil y le cae mal a todo el mundo. Olvidé mencionar que a causa de alguna decisión estilo Mario tú solo puedes destruir a los demás jinetes por medio de triturar su cráneo bajo el peso de tu avestruz. Aparentemente, atravesarlos con tu lanza no funciona. Pero no es un gran problema, de hecho no es ningún problema, el juego resulta muy divertido de todas formas. Más allá de eso, el juego nunca se torna demasiado complicado a medida que avanzas los niveles. Hay diferentes niveles con diferentes tipos de condiciones, como un nivel de huevos (lleno de huevos, y debes recogerlos antes de que revienten), un nivel de supervivencia, un nivel de criaturas prehistóricas voladoras, etc.
Tiene una jugabilidad estilo antigua muy buena y realmente no hay nada de qué quejarse.
A pesar de todos sus puntos favorables, creo que los controles y la extraña dificultad para matar a los enemigos (saltar sobre personas con lanzas y atravesar criaturas prehistóricas con presición quirúrgica) disminuye un poco la calidad general del juego. Por lo tanto, debo otorgarle a este juego la resonante y apenas buena calificación de 3. Pero no te apenes mi querido Joust, esa es una calificación perfectamente buena, ¿que más esperabas para un juego sobre personas montando avestruces matándose unos a otros y asesinando inocentes criaturas prehistóricas?
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