Si no fuera por el hecho de que Popeye es un famoso personaje de historietas y que este fue un gran juego de plataformas para el C64, ni siquiera hubiera considerado en analizarlo.
No me entiendas mal, el juego de hecho es bastante bueno, pero hay algo acerca de los gráficos... En el DOSBox da una extraña resolución de 320x400 que hace que todo se vuelva loco. Ya verás lo que quiero decir en la parte inferior de la pantalla. No es algo que necesitarías para jugar, pero es una falla. Y en WinXP corre demasiado lento para jugar. Bueno, al menos los colores son buenos y los personajes muy bien hechos.
El sonido también es de una calidad pobre. Sin embargo lo necesitarás, porque cuando lo escuches, quiere decir que se ha encendido una bomba y necesitas tocarla para extinguirla.
¿Y cuál es el punto del juego? Bueno, necesitas escalar un sitio de construcción. El tiempo es limitado y hay obstáculos en el camino. Caen barriles desde arriba, hay bombas que se activan aleatoriamente, rieles de acero que caen o desaparecen bajo tus pies, resortes y fuego. Y no nos olvidemos del Wimpy. El no te dejará seguir hasta que le lleves su dosis de hamburguesas (necesitarás recogerlas en el camino). También llegarás a pelear. Primero tendrás que recoger la espinaca. ¿No la encuentras? No te preocupes, esta se moverá a tu alrededor, cuando llegue el momento de pelear.
Básicamente el juego es una buena idea y realmente me gustaba la versión del C64. Esta versión trata de ser tan buena como la del C64, pero no tiene éxito. No he tenido la oportunidad de probarla en un ambiente verdadero de DOS, pero esperemos que funcione mejor allí. Aún así es jugable y divertido. En conjunto el juego merece una buena calificación por el modo de juego y el diseño, pero una mala calificación por el mérito técnico.