Éste es uno de los últimos grandes juegos de pinball de “21st Century Entertaiment”. La idea en la que se basa es única hasta la fecha.
El último juego de pinball que comenté fue Pinball Fantasies, y dije algo así como “¿Un argumento? Es un pinball, lo puedo decir más alto pero no más claro”. Este juego me corrige. Después de iniciar el juego, seleccionas el nivel de dificultad y tienes una opción para reiniciar un juego guardado. ¿Un pinball en el que guardas los juegos? Esto es nuevo. Después te llevarán a una mesa bastante inimaginable. No te preocupes, aún no estás jugando. Ésta sólo sirve para decidir en qué máquina (localización) comenzarás el juego. La que está encendida cuando pierdes la bola es aquella en la que comienzas.
Y ahora, estás de camino hacia tu primera máquina. Obtendrás opciones de bonos para acceder a una máquina secreta. Una vez que enciendes el nombre de la máquina, viajarás hacia la siguiente. Necesitas controlar el vehículo que te dan (incluso un transatlántico oceánico cerca del Triángulo de las Bermudas) para alcanzar tu próximo destino en el tiempo que te dan.
Una vez que has completado todas las máquinas por todo el mundo terminas el juego; pero no es tan fácil como suena.
No perderás bolas. Verás cajas con números en la parte inferior de la pantalla. Cuando tu bola entra en una caja, el número disminuirá. Una vez que el número llega a cero pierdes una bola.
El marcador parece bastante complejo pero, de nuevo, éste no es un juego de pinball que jugarás para conseguir la máxima puntuación. No, debes moverte por el mundo y alcanzar la localización siguiente antes que mejorar tu puntuación personal en la máquina que hayas escogido.
Por tanto, éste es un juego de pinball con un cierto giro.
Los gráficos son bastante agradables y representativos de la localidad en la que estás. Los sonidos están bien, pero no son nada especial (no te sacarán de tus casillas, normalmente) y el juego muestra cierta variedad, dejándote moverte de un lugar a otro.
En cada máquina hay algo distinto que hacer, pero la premisa principal es la misma: encender el nombre de la máquina siguiente ¡y seguir adelante!
Teniendo en cuenta la novedad de la idea, este juego ya merece un cinco; si añadimos el inmaculado desarrollo del juego, entonces lo merece más. Sólo me queda avisar a los usuarios de DOSBox de que aumenten la velocidad del ordenador. El juego también se puede jugar a baja velocidad, pero no es muy divertido.