Boulder Dash, de acuerdo al artículo de Wikipedia, fue uno de los pocos juegos que en vez de pasar de arcade a PC, fueron diseñados primero para los computadores de escritorio y más tarde re-editados para arcade. Rockford es la conversión para PC del juego de arcade licenciado oficialmente.
El juego pasó de ser un sencillo juego de rocas y diamantes a incluir cinco personajes en cinco escenarios distintos: un explorador en la jungla sudamericana (los tucanes son un claro indicador de ello), un cocinero, un vaquero, un astronauta y un cirujano. Hay cuatro niveles para cada uno de los mundos. Debes recolectar monedas mientras evitas o matas a los enemigos - sólo se puede entrar a la puerta que lleva al próximo nivel si se ha recogido el número de monedas requerido. Se puede matar a los enemigos dejando caer rocas o monedas sobre su cabeza. Por otra parte tú mueres si ellos te tocan o si cae una roca o moneda sobre tu cabeza. Normalmente hay dos tipos de enemigos móviles en cada mundo: uno que explota en monedas y otro que simplemente explota. Así que con frecuencia pasar de nivel conlleva matar tantos enemigos del tipo adecuado como sea necesario para recolectar las monedas. Es un concepto peculiar con una elegante variación en los tipos de niveles a lo largo de los cinco mundos.
No hay verdadera música, salvo por la intro y una molesta canción cuando a) mueres o b) pasas de nivel. Los efectos de sonido son de altavoz de PC, así que sólo se escucha el tintineo de las monedas al caer (o el golpe seco de las rocas), un sonido de pasos repetitivo y sin sentido y el ruido de una explosión cuando algo cae sobre ti. Las explosiones abarcan un cuadrado de nueve espacios, así que asegúrate de no estar cerca cuando sucedan.
Hay mucho de humor en las distintas situaciones, siendo el cirujano especialmente entretenido. Te ves perseguido por calaveras rodantes o por mariposas hechas de dos orejas purpúreas (repulsivo, pero al menos no son cerebros ni riñones), y las rocas se convierten en grandes y espeluznantes globos oculares. Las paredes son rojas con dentaduras arrancados de su cuerpo que te sonríen. Después de un rato da un poco de náuseas, como si trataras de ver CSI mientras comes curry (no intenten esto). Mi mundo favorito es el del astronauta - hay que esquivar galaxias giratorias y algo que parece una cruza entre gallinas amarillas y la Nave Espacial Enterprise, recolectando soles en el camino. Aquí las rocas son planetas Tierra en miniatura. El tercer nivel es el único en que aparece la ameba, que te puede atrapar si te acercas demasiado, y hace que los enemigos exploten en monedas por cantidades.
También hay extrañas criaturas gusano con la habilidad de convertir monedas en rocas (o vice versa). El mundo del vaquero tiene un tren de vagones con un caballo en ambos extremos, mientras que el cocinero tiene cadenas de hamburguesas y pizzas (la hamburguesa convierte las naranjas en manzanas - es decir monedas - y la pizza convierte las naranjas en huevos fritos - que te pueden matar mientras vuelan).
Lo que hace este juego divertido es el elemento de presión - para cada nivel hay una cantidad limitada de tiempo. Después de un rato se hace instintivo (a veces siento que podría jugarlo con los ojos cerrados) pero al mismo tiempo hay incertidumbre suficiente como para mantener el interés en competir con tus puntuaciones anteriores. El juego puede durar eternamente ya que se recibe una vida por cada 40 000 puntos, y al completar un mundo simplemente puedes comenzar otro. Desafortunadamente, no hay salón de la fama para este juego.